Recientemente un dirigente de la ya consolidada
“oposición de la oposición” (ellos se denominan partido gobernante) calentando
motores para las elecciones europeas, inició su argumentarío, justificando sus políticas de
recortes y la buena dirección por la que caminamos. Y nos dejó bien claro sus
nuevas intenciones: “nunca, nunca, nunca
(lo repitió tres veces como San Pedro) olvidaremos
a la gente que más necesita”, “ahora es el momento de la recuperación de las
familias”. O sea, que tras desestructurar las familias, diezmar sus
economías, saquear sus viviendas y hurtarles los servicios más esenciales, se
ponen manos a la obra para recuperarlas. Hay que fastidiarse. Primero te matan y luego te
resucitan, sin grandes gastos sanitarios, ni anestesia, que el muerto no siente….
Y
¿cómo sacar de la crisis a quienes lo han perdido todo y sobreviven entre graves
carencias económicas, depresiones, angustias e impotencias? Pues, que se pasen por los servicios sociales
a gestionar las ayudas de emergencia
“surtidas de presupuestos” para la
recuperación de sus causas.
Efectivamente, estas familias que ahora pretenden recuperar están
pasando por la unidad de cuidados intensivos de los servicios sociales todos
los días. Llegan llenas de hipotecas y alquileres impagados, sin trabajo ni
prestaciones básicas que las dignifiquen. Cuando entran en nuestros despachos, lo
primero que se percibe es su vergüenza
por haber tenido que acudir hasta allí, recibimos las miradas de personas que nunca te hubieran
deseado conocer, sus impotencias con la falta de palabras de unos y la
verborrea y rabia de otros.
Es entonces cuando l@s trabajadores de los servicios sociales adquirimos una gran
responsabilidad con nuestras fortalezas
y “poder” en el proceso de ayuda. Convivimos
con experiencias de injusticias ligadas a las estructuras de poder y es
en este contexto donde hemos de conjugar
nuestro “saber profesional con “el saber
hacer”.
Ese poder se
basa , como ya que referí en una anterior entrada (ver),en
dar a l@s usuari@s “la información
necesaria sobre las disposiciones legislativas y administrativas y sobre los
derechos ,deberes, ventajas, desventajas, recursos y programas pertinentes”
obviando indicaciones que alguna vez hemos tenido que oír con expresiones tales
como: “cuantas menos explicaciones mejor. Hay que informar de lo estrictamente necesario”.
La
información da poder y en el poder de nuestros “saberes profesionales” radica
la seguridad, certidumbre y capacidad de elección que necesitan las familias
que necesitan ayuda.
Un
poder mal ejercido, autoritario, disuasorio y enjuiciador, puede, por ejemplo, llegar
a etiquetar a las personas que acuden a los servicios sociales solicitando
ayudas económicas en “estafadores en potencia”. Esto se traduce en una práctica de estrictas justificaciones y convivencia con
las injusticias sociales que algunos poderes establecidos realizan en las
distintas administraciones públicas y/ó privadas. En
definitiva las fortalezas y el poder del
trabajo social bien ejercidas potencia las posibilidades de elección y de cambio de nuestr@s usuari@s.
Los principios básicos de libertad y dignidad en
las que se basan nuestras acciones profesionales, deben también formar parte
de nuestra idiosincrasia personal y ser
pilares en los que radique nuestro poder y haber profesional.
Seremos eficaces en la medida que más libertad y dignidad ejercitemos.
La frase final lo borda :)
ResponderEliminarBegoña, lo que me irrita sobremanera es la forma de la que nos venden, o nos intentan vender el desmantelamiento de los Servicios Sociales, el cinismo con que justifican lo injustificable, nos tratan y tratan a los afectados como personas sin juicio ni entendimiento, nos quieren hacer comulgar con ruedas de molino.....
ResponderEliminarPara sobrevivir profesionalmente solo nos quedan foros como éste y la conciencia de, en nuestro trabajo, informar acorde a lo que está pasando en realidad, y no acorde a la política de la entidad, que en la mayor parte de los caso,s por no decir en todos, esta perversamente tergiversada.
Me preocupa como a ti Chiqui lo que nos intentan vender pero sobre todo el que a su vez inrtenten que nosotr@s l@s trabador@s vendamos "su producto" inservible. Por eso creo en la gran necesidad de ejercer nuestro "poder" sin dilemas y con la fuerza de nuestra libertad y dignidad. Este blog estará siempre abierto para ejercer ete poder .No dudes en encontrarnos aquí.
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